El pasado 5 de septiembre tuvo lugar la proyección apertura del 21ª Edición del Festival Latinoamericano de Video y Artes audiovisuales. Con cita a las 19.30 en el cine El Cairo (Santa Fe 1120) se proyectó, en carácter de estreno,Guía de Rosario Misteriosa 2: una ciudad para armar, una película animada de 65 minutos destinada especialmente al público infantil, co-producida por el Centro Audiovisual Rosario y la Cooperativa de Trabajo Animadores de Rosario Ltda., cuya presecuela había sido estrenada en la 20º Edición del festival, en el año 2013.
Hay que llegar temprano. Eso está claro. Al menos en este tipo de eventos donde el reloj de arena anuncia que, cuando no quedan más segundos por caer, la entrada se cierra y no hay acreditación especial que permita gambetear las reglas. Por suerte ella – que nos mira, nos cree y sonríe tímidamente – sabe gambetear y con el silencio como bandera nos deja entrar.
La oscuridad nos comió los ojos que, sorprendidos y atentos, intentaron acomodarse a la luz, al lugar y, sobre todo, a la silueta confusa de unos bigotes que, delante de la cara de un viejo al que se lo nombra como ‘profesor’, nos cuentan la historia del suelo que estamos pisando.
No está solo, todo protagonista necesita un compañero, y es por eso que hace el recorrido junto a su mascota – un perro a veces más inteligente que él – que suele aprovecharse de su olfato para encontrar los indicios que conectan la historia.
Ellos, con su tablet parlante como guía, atraviesan, histórica y geográficamente, la ciudad de Rosario para conectar el presente con el pasado e invitarnos a jugar a reconocer en su relato ‘lo que alguna vez fue’ de ‘los sitios que ahora son’.
De los Barcos al Monumento
En un interesante y atrevido enroque de imágenes y caricaturas en 2D, los protagonistas se conectan con la historia de una ciudad que fundamenta su acento y su distribución, en la participación activa de los inmigrantes. Éstos, no sólo llegaban como nuevos inquilinos a estas tierras sino que, en relación con los distintos intereses que surgían a lo largo de los años, fueron diseñando una ciudad que mezclaba la arista industrial (abocada principalmente al río Paraná), los ferrocarriles, las mansiones despampanantes de los señores de ‘apellido importante’, el fútbol y los conventillos.
Agrupados de a cientos, los obreros se amontonaban en enormes casas preparadas para albergar a sus familias. El verbo ‘preparar’ es generoso a la hora de completar la frase ya que verdaderamente eran sitios hostiles – algunos agrupaban más de 500 familias – en donde, por ejemplo, había un baño para todos y eran comunes los episodios de violencia y robos. Como si el escenario no fuese complejo, sucedía también que las precarias condiciones de higiene fomentaban la existencia de epidemias que solían matar a gran parte de los habitantes del lugar.
En contraposición con la supervivencia obrera aparecen los dueños de los medios de producción. Como la historia siempre nos ha contado – y Argentina no iba a ser la excepción – existieron (y existen) quienes poseían lugar de sobra para vivir, disfrutando del ocio bastante lejos de la pesada vida del trabajador.
Varios de los nombres propios de la ciudad – que aparecen en las calles que hoy transitamos – han firmado su perpetuidad en Rosario con la misma pluma con la que garantizaron para sus descendientes un futuro de comodidad. Ninguno de ellos, pudimos apreciar, se anotó con apellido doble… detalle que no explica nada tal vez pero sorprende sabiendo que antiguamente las combinaciones de ancestros era un signo de status quo privilegiado.
Mucho más que un deporte
Con la espalda al río durante mucho tiempo, Rosario fue comandada según los intereses que defendían aquéllos que manejaban el timón de la ciudad. El puerto – junto a los ferrocarriles – como piedra angular de las relaciones comerciales, no sólo trajo inmigrantes trabajadores sino que además, es responsable de la llegada de la pasión que se anota en el ADN de la ciudad: el fútbol.
Tanos e ingleses trajeron la pelota pegada a la suela y nos explicaron cómo usarla para que años después seamos nosotros quienes les mostremos cuánto hemos aprendido.
Fin del viaje
Con el mapa completo y la ciudad recorrida casi en su totalidad, Rosario y sus misterios comienzan a desnudarse en una historia que no cabe en 65 minutos. Sin embargo, y a pesar de que quedan varias páginas sin leer sobre la ciudad de la bandera, el profesor y su perro celebran haber alcanzado el fin del recorrido.
Nos quedan preguntas abiertas, nos quedan signos de interrogación que se llevan puesto a algunos personajes que hoy relucen en las veredas de la ciudad, pero entendemos que el reloj de arena volvió a mostrarnos el fin del camino.
Con un intenso ‘hasta luego’, que promete volver a citarnos para charlar de lo que todavía no se contó, aplaudimos este hermoso trabajo que nos sacó a bailar con el tiempo reconstruyendo lo que hoy nos sostiene. Es hora de irse, hasta los aplausos han apagado sus gritos y sólo nos queda aguardar por una tercera parte.
Cooperativa de Animadores de Rosario
Donde la magia de la animación tiene su lugar. Conversando con Martín Rolle y Valeria Boggino.
Desde el año 2006 funciona en Rosario, más precisamente en el Centro Audiovisual (CAR),la Escuela Para Animadores (EPA en la calles Viamonte 929). Surge ante la necesidad de abrir un espacio en donde los dibujantes aprendan a animar sus creaciones. Funciona como un curso anual en el que se dictan materias muy específicas de animación y otras que aportan a ésta como construcción de personajes, guión, sonido, etc. La sede es en la Isla de los Inventos; y el objetivo de la Escuela es que el alumno que sepa dibujar con su estilo propio, pueda concluir el cursado con un cortometraje de su autoría.
El surgimiento de la Cooperativa de Animadores se remonta a la primera camada de egresados de la EPA, con su primer gran trabajo que fue: “Rosario, Guía Misteriosa 1”, un proyecto de Pablo Rodriguéz Jauregui, allá por el año 2007. Desde entonces fueron pasando los socios, se fueron sumando proyectos y el trabajo empezó a crecer. La cooperativa se conforma en un espacio donde los egresados de la EPA (Escuela para Animadores) puedan continuar nucleados, desempeñándose en torno a la animación en diferentes proyectos que van surgiendo. Además, es una alternativa local para la industria, que básicamente se encuentra en Buenos Aires.
En palabras de Diego Rolle: “La propuesta de la Cooperativa, desde un principio, es hacer producciones locales, para un público local, cubriendo un espacio que en la animación no existe. No queremos hacer películas para el mundo entero, sino para nuestra ciudad y nuestro país. Realizar cosas que generan una empatía más fuerte que las cosas que vienen de afuera.”
La Cooperativa, co – produciendo con el CAR, realizó cinco temporadas de un programa de televisión llamado “Cabeza de Ratón”, del cual se han desprendido varios largometrajes. Actualmente están trabajando en la sexta temporada, la cual está integrada en parte por el largometraje animado “Guía de Rosario Misteriosa. Una Ciudad para armar 2.”
En ella se siguen los pasos de “Guía de Rosario Misterios 1”, pero esta vez indagando en barrios e historias de la ciudad que no fueron contadas anteriormente. “La película narra historias urbanas de la Rosario de principio de siglo y de cómo ésta se fue conformando. Además se ha invitado a dibujantes de la ciudad a integrar esta historia, en la cual cada uno aporta su estilo bien personal.” Según nos cuenta Valeria Boggino, Directora del CAR.
La relación que existe entre la EPA y la Cooperativa de Animadores es muy íntima, si bien una es inherente a la otra, hay que destacar que la Escuela es una institución que pertenece a la Municipalidad de Rosario, mientras que la Cooperativa es una productora independiente. No obstante se retroalimentan mutuamente, ya que los docentes de la EPA son socios de la Cooperativa y los egresados de la EPA son – generalmente – nuevos socios de la Cooperativa.
Cabe destacar también que la actualización y la capacitación de los socios de la Cooperativa es de autogestión. Además, desde este año brindan talleres para la comunidad de After Effects, Montaje, Flash, entre otros. Los interesados podrán pasar por Viamonte (nro) sede de la Cooperativa de Animadores.
Otro proyecto de la EPA son los encuentros de animadores que se realizan cada dos años. Estos reúnen a este sector de la producción audiovisual del país y la región, en dos o tres jornadas que se realizan en la ciudad de Rosario, para que puedan compartir experiencias – ya sea a nivel de formación formal, digamos en instituciones educativas universitarias o terciarias; o experiencias de educación informal como es el caso de la EPA y otros talleres. – También es un espacio para compartir con referentes del dibujo y de la animación como Caloi, García Ferrer, entre otros. Suelen ser espacios de mucho intercambio, muy ricos en debates y de muestra de lo que cada uno está haciendo.
La Cooperativa en co – producción con el CAR y la Secretaría de Cultura y Educación, llevaron adelante este proyecto que es Rosario Misteriosa una guía para armar 2. Es la continuación de la 1, estrenada en el año 2013 y realizada en 2007. Actualmente se encuentra de gira por los cines de los barrios de la ciudad y por el clásico Monumental de Rosario.
Bonus track: «Haciendo dibujitos en el fn del mundo. El libro de la Escuela para Animadores de Rosario.»
Por Antonella Cassina, Clarisa Lago, Juan Campos y Lisandro Lombardero. Estudiantes del Seminario Ciberculturas ciclo 2014.
Les pedí las fotos/ilustraciones por separado, q la suban al grupo, y la dirección completa de la Cooperativa.
