En la charla titulada “Afrontar el cambio de época: desafíos de los proyectos democráticos y populares”, Alicia Entel desarrolló en profundidad cómo se manifiestan estos cambios. “El cambio de época es tan contundente que marea”, afirma. Este nuevo porvenir que estamos atravesando conlleva un “continuum de incertidumbre”, donde la disolución es protagonista, en detrimento del control. La periodista introdujo una interesante analogía al respecto: “El cambio es tal, tan grande, que parece que nada cambiará, como cuando viajas en avión y parece que se siente detenido”.

Ahora bien, un punto neurálgico que advierte la investigadora al cual debemos estar atentos en estos tiempos de cambio, es el “giro fascista”. En estas sociedades circulan discursos de odio entre distintas organizaciones y estructuras político-económicas que no son sino neofascismos. “Estos más que discursos de odio son discursos de aniquilamiento”, describe Entel. Y añade: “Odio sentimos todos. Yo siento odio mil veces al día. Pero estos discursos e ideas son distintos: buscan el aniquilamiento del otro. Y esto ya lo vimos a lo largo de la historia, por ejemplo, en Argentina en los años ’20 con la Liga Patriótica, que promovía el discurso ‘hagan patria y maten a un judío’”.

El capitalismo, o el capitalismo “feudal” como le llama ella -debido al cercamiento en muros simbólicos por parte de determinadas elites, en donde el resto de la población mundial queda por fuera-, como también este “giro fascista”, atentan contra los proyectos democráticos y populares. Imposibilitan su desarrollo. La concentración extrema de la riqueza, la depredación de los recursos, la ausencia de derechos básicos, son algunos de las consecuencias del propio capitalismo. 

Otro problema que conlleva este capitalismo es la situación migratoria y racial. Para ampliar al respecto, la investigadora remite a una interesante anécdota: “Hace unos días me encontraba en Barcelona con un amigo, y caminábamos por la Barceloneta, bordeando el Mar Mediterráneo. Y me surgió la pregunta: ¿ustedes se pueden seguir bañando en el Mediterráneo con tantos muertos en el fondo del mar? Es una realidad, miles y miles de migrantes mueren en el mar intentando entrar a Europa, intentando entrar a las puertas del capitalismo”. 

Retomando la noción de cambio de época, Entel afirma que la transformación se manifiesta no sólo en términos de superestructura, sino también en la cotidianeidad, en los modos de convivencia. Tanta incertidumbre genera miedos y estrés. Predomina una expansión de la sospecha para con el otro en detrimento de la solidaridad.

En efecto, esta desestabilización y confusión salpica a la comunicación también. “¿Cómo puede ser que hablemos de ‘saqueos’ cuándo asaltan un supermercado, pero no cuando se roban un lago entero?” Se refería a la apropiación del Lago Escondido, al sur de nuestro país, por parte del empresario inglés Joe Lewis.

Por supuesto, la metamorfosis que atravesamos no es casual. Entel comenta distintos puntos de inflexión: Auschwitz, la caída del Muro de Berlín, las bombas atómicas, la Revolución tecnológica. Además, identifica tres dimensiones que estamos vivenciando y que están siempre presentes en un cambio de época: hambre, peste y guerra. Estas tres problemáticas hoy afectan a 7000 millones de personas alrededor del mundo. 

Por otra parte, comentó que el concepto democracia varía en los distintos puntos del planeta. “Ya sea como realidad, deseo o utopía, la idea de democracia se modifica en los distintos lugares. Para los argentinos probablemente remita al proceso de ‘Verdad y Memoria, por ejemplo, mientras que para los londinenses remita a la reina o para los haitianos no exista”, comentó la académica.

El encuentro duró aproximadamente dos horas y contó con la presencia de algunos de los catedráticos más importantes de la carrera de Comunicación Social de Rosario, connotando la importancia de la charla y el prestigio de Alicia Entel. 

Por Ignacio Botti, estudiante de Seminario Ciberculturas, ciclo 2022.