En el marco de las actividades realizadas en la Feria del Libro, tuvo lugar en el Centro Cultural Roberto Fontanarrosa la charla-debate “La actualidad de la historieta argentina”, que contó con la organización conjunta de la Crack Bang Boom y la presencia de los artistas Enrique “Quique” Alcatena, Paula Andrade y Luciano Vecchio como expositores.

Podemos afirmar que estamos frente a una gran cantidad de transformaciones que se han ido dando en diversos ámbitos y en períodos de tiempo relativamente cortos. Pensemos cuánto ha pasado desde que nuestros celulares empezaron a convivir con nosotros en nuestro bolsillo, o aquella vez que comenzamos a mandar mensajes de texto. Luego, allá por 2009, crecería en auge una plataforma llamada Facebook que vino a cambiar las relaciones de los usuarios con la red para siempre, conformándose como un espacio donde podíamos compartir fotos y encontrar a las personas con las que perdimos contacto. Actualmente, las redes sociales se han convertido en una novedosa herramienta, que no sólo agregó utilidades, sino que otorgó muchas nuevas posibilidades, y en las cuales se generan fenómenos innovadores.

Posteriormente, la evolución de los dispositivos móviles también hizo que se incorporasen a la red, para su uso en otra plataforma. Todos estos avances han ido ampliando y aumentando las capacidades de las mismas, y cambiando la lógica para resolver nuestras tareas y proyectos, a tal punto que también significaron una transformación en la forma de relacionarse e interactuar con otros.

En este sentio, asistimos a la formación de comunidades virtuales diversas, como es el caso de Tótem Comics, que opera, entre otras, en la plataforma de Facebook. En la página se puede ver el trabajo de muchos artistas, sumado al feedback de sus lectores, y donde los historietistas pueden intercambiar trabajos, ideas y opinar sobre los mismos, en una dinámica novedosa, siendo la instantaneidad la marca particular que posee este espacio.

A propósito, Paula Andrade, dibujante que trabaja con la plataforma, comentó:

 “Toda la valoración que no estaba recibiendo en mi entorno más cercano, si la estaba teniendo en internet. Yo empecé a mostrar todos mis trabajos por internet, antes de mostrarlo en físico. A los 15 años, me había hecho mi fan page de Caballeros del Zodíaco y a partir de ahí empecé a mostrar dibujos y tenía un feedback importante, y eso me dio la confianza para empezar a mostrar mis trabajos en papel”[…] “Poder compartir de igual a igual, de una, es invaluable.”

Se puede observar un intercambio constante que supone un beneficio por partida doble, tanto para el artista que da a conocer su trabajo, como para el lector, en la interacción, lo que da como resultado un vaivén de ideas e interpretaciones permanentes que pueden contribuir al desarrollo de una dinámica nunca antes vista.

Paula agregó: «Para mí el lector siempre fue invaluable, y de ahí salto al editor. Es en parte, se estaría en el medio de alguna forma. Entre el lector y yo. Ya sea esta cosa de tirar material en la web y que luego me digan que le pareció. No sé…estar de viaje y que me escriban: “Acá estoy en la playa con tu libro y me pareció esto y esto” y me cuentan sus vidas. Y yo ¡wow… que loco que te pareció todo esto yo no lo había pensado! pero genial también el escuchar diferentes interpretaciones de los personajes que yo había creado y de repente te saltan con algo que nada que ver a lo que uno pensó. Si para vos es así, está bien también.”

Por su parte, Luciano Vecchio, artista reconocido por sus trabajos para las editoriales estadounidenses Marvel y DC, comentó lo siguiente:

“A mí me pasa que como está muy pegado mi obra de autor con mi discurso, o sea, mi discurso está en la obra y afuera y está ahí. Y entonces para mí la historieta es una. A ver, yo me encontré como autor hace poco, el grueso de mi carrera fue dibujante de guiones ajenos y lo sigue siendo, pero encontré en esta faceta autoral, que la historieta es un mecanismo más para un discurso que me trasciende y me toma. Y también me pasa eso, son distintos tonos, Pau me dice que soy más picante por las redes y después en persona soy más tímido. Pero bueno, el diálogo está, se genera y me parece sobre todo, que cuando hay cosas que antes no estaban tan dichas, y me encuentro con que alguien me escucha,  con que tengo que hacer algo con esto. Se volvió algo muy valioso y ya nos enseñó Spiderman que un gran poder es una responsabilidad, asi que hay que usarlo bien […] Y después también pensaba que se pierde quizá mucho el lector con el devenir colega, o quienes fuimos lectores primeros e hicimos ese camino que incluía el diálogo sobre la obra. Y eso, en la historieta pasa mucho, que muchos de los que hacemos, también consumimos”.

En elcomentario de los artistas podemos entender y observar cómo las redes son artífices de relaciones nuevas y nunca antes pensadas. Engendra una gran capacidad de estímulo-respuesta, desde los comentarios de los lectores hacia el artista, la influencia en su ánimo y la respuesta del mismo hacia los lectores, generando una suerte de diálogo, posible gracias a la instantaneidad de la plataforma.

Esto agrupa a estas personas bajo de un tema específico, en el cual se encuentran inmersos, formando una pequeña comunidad donde destaca la cultura de la historieta y el amor por la misma. Vemos que, gracias a estas redes, somos capaces de conectarnos no sólo en la vida real, sino también en el ciberespacio, bajo una consigna, una especificidad, una interacción: dando forma a una verdadera cibercultura.

De izquierda a derecha: Eduardo Santillán (moderador-organización CBB), Luciano Vecchio, Paula Andrade y Enrique Alcatena, dando el presente en una nueva edición de la Feria del Libro.

 

Por Matías Manuel Maruelli Barrera y Khalil Ivàn Veronessi, estudiantes del Seminario Ciberculturas, ciclo 2018.