Tiempos de internet, era digital, globalización. Lo más veloz es lo más parecido a lo ideal, a la perfección. Tiempos de deslizamientos sin profundidad, monopatín eléctrico, skate, rollers, zapping, miles de canales, diarios digitales.
Hoy el zapping tiene múltiples usos, de una pantalla a otra sin cesar. Nos asomamos al mundo y todo esto nos lleva a una pantalla global – macro -, un entramado infinito con contactos efímeros que, en muchas ocasiones, nos deja con más insatisfacción aún. Nos deslizamos por la superficie, casi todo se convierte en imagen. Nos faltan palabras. Todos con todo y en todo momento. Las pantallas pueden pensarse como los espejos de Alicia, donde se entra a un mundo maravilloso de sensaciones mágicas, únicas, absurdas también.
El sujeto es en tanto al otro como modelo, como enemigo, como ideal. ¿Qué sujeto podemos pensar cuando “ese” otro es virtual? Si bien es cierto que lo anteriormente descripto vino para quedarse, debemos respetar aquello que nos subjetiviza, nuestra afectividad, nuestros sentimientos, y hacer un uso racional de este veloz deslizamiento.
No debemos perder de vista que es imprescindible el lazo con el otro para una constitución subjetiva lo menos fragmentada posible, lo menos dividida posible. Debe haber profundidad, compromiso amoroso, que es lo más genuino que posee el ser humano.
¿Qué sujeto podemos pensar ya que el otro es un “otro” virtual? Desde hace tiempo estamos pensando a otro tipo de sujeto, sometido por un lado al mercado, hipnotizado por los medios. Al decir de Nora Merlí, hay un dispositivo social neoliberal que produce un sujeto de consumo acrítico, un sujeto convertido en un objeto que hace serie.
El malestar en la cultura
En el Diario Perfil, del sábado 26 de septiembre de 2020, se publicó una nota al cumplirse los noventa años de la escritura de El malestar en la cultura. Lo cual lleva a reflexionar sobre algunas cuestiones; obviamente la vigencia y la actualidad que nos pone Freud nuevamente en debate. Fue escrito en Viena, en 1929, en un contexto socio-histórico particular. ¿Cuáles son los puntos que se pueden situar y resignificar en estos días? En este mundo globalizado, atravesado por la pandemia del COVID 19, que nos deja a todos de un modo u otro suspendidos en el aire, de lo que llaman nueva normalidad. Freud tuvo la posibilidad de pensar en macro, no solo en este texto, “salir del consultorio”, para pensar y escribir acerca de la condición humana y sus complejidades. Destaca en 1920, que fuimos programados para ser felices; qué ocurre con la frustración, la insatisfacción, esta idea de incompletud del ser humano, que nos deja a la intemperie. Apenas comenzada la pandemia en nuestro país, a través de las redes hemos podido ver innumerables propuestas de “qué hacer “, cómo “entretenerse”. Y, en realidad, con estas alternativas de “ordená la casa”, “ construye tu propia huerta”, etc, se intentó taponar la angustia proveniente del mundo exterior, amenazante, de la propia muerte. No puede leerse en este caso como vía de sublimación… sino más bien lo contrario, podríamos denominarlo de “obturación”, “negación”. No se le puede proponer al sujeto frente a tal incertidumbre que se “distraiga”, que plante suculentas, que ordene por color la ropa. La sublimación, nos dejó en claro Freud, es otra cosa. En todo caso, ver qué ocurre con la angustia singular y qué lectura puede hacerse desde lo colectivo. Esta pandemia vino a poner luz a la fragilidad del mundo entero. Llevará tiempo poder leerla, intentar interpretarla. Lo que sí podemos asegurar es que este año lo hemos transitado de un modo diferente para el que nadie ni nada estuvo preparado. Ni desde lo subjetivo, lo sanitario, lo político y lo colectivo. Fue, es y seguirá siendo en el devenir de cada sujeto que podrá verse cómo afecta esta nueva “normalidad”. Para quienes trabajamos desde el psicoanálisis como disciplina, no deja de ser un desafío repensar también las prácticas.
Por Débora Neuman, docente de la cátedra Cultura y Subjetividad de la Lic. en Comunicación Social UNR.
Bibliografia:
Freud, Sigmund – Psicología de las masas y análisis del yo (1920)
Freud, Sigmund – El malestar en la cultura (1927)
Merlí, Nora – La colonización de la subjetividad (2017)
Wallerstein, Immanuel – Abrir las ciencias sociales (1996)