La pandemia de COVID-19  obligó prácticamente a todo el mundo a permanecer en sus hogares. Ante la falta de presencia física en muchos espacios, la virtualidad lideró la cotidianeidad de la gente. Un claro ejemplo son los museos, que hace tiempo vienen adentrándose en tecnologías de interacción para atraer a sus públicos y transformar esas formas de estar y de contar.

Es evidente que esto tiene una gran relación con el contexto y con la necesidad de innovación dentro de los museos o espacios culturales. Podemos afirmar que estas transformaciones en estos espacios se corresponden con el universo narrativo de la comunidad a la que se dirigen.

El dinamismo de la virtualidad, consecuencia de la necesidad de permanecer en nuestros hogares, generó una abundancia de información en todos los aspectos. En este contexto, la búsqueda de fuentes confiables se vuelve más compleja, y empieza a depender más de la voluntad e intención de cada uno.

 

Para poder recopilar y divulgar las diferentes formas de expresiones humanas que surgen en la sociedad, los museos comenzaron a implementar el storytelling. Esta práctica es el arte interactivo de usar palabras y acciones para revelar los elementos e imágenes de una historia al tiempo que alienta la imaginación del oyente. Más allá de que pueda sonar como un término nuevo, es una actividad ancestral que le ha permitido a la humanidad, a lo largo de la historia, conservar su patrimonio cultural inmaterial. Nos referimos a aquellos usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas transmitidos de generación en generación, que infunden a las comunidades y a los grupos un sentimiento de identidad y continuidad. Creemos entonces que las historias son, en su esencia, vehículos de cultura, y que conforman el entramado cultural de toda comunidad.

Contar historias no solo implica palabras sino también acciones que ayudan a revelar y, al mismo tiempo, fomentar la imaginación del oyente. Por eso, las nuevas propuestas de los museos comprenden actividades interactivas que habilitan nuevos tipos de conversaciones entre el público y la institución.

A continuación queremos mencionar ciertas propuestas de museos territorialmente cercanos, que nos permiten dar cuenta de este fenómeno en auge:

MUSEO CASTAGNINO

El Museo Castagnino de nuestra ciudad cuenta con un recorrido virtual de la muestra Arte Argentino que reúne los 100 años de la colección del Castagnino + Macro. Estuvo a cargo del Estudio VRIO que ha logrado una novedosa experiencia inmersiva a través de la aplicación de la tecnología de representación tridimensional.

El Castagnino cuenta con obras que se han ido coleccionando desde hace más de 70 años y en crecimiento. Pinturas, esculturas, grabados, piezas europeas de diversas épocas, instalaciones y fotografías conforman la colección Castagnino + macro. Las muestras que se realizan periódicamente contemplan, además de toda la colección, obras y retrospectivas de artistas invitados, a consideración de los criterios curatoriales del museo.

La institución hace hincapié en la documentación y catalogación de las obras, en la promoción del arte y la incorporación de obras contemporáneas argentinas de las más diversas regiones, mediante un programa destinado a tal fin, cuyo principal flujo nutriente proviene del espacio de arte contemporáneo, su sede el Macro.

 

Acuario del Río Paraná 

Nuestra ciudad también cuenta con un acuario del Río Paraná. Desde su apertura ha atraído a muchos visitantes por su innovadoras experiencias de observación, que se enriquecen con otras experiencias sensoriales transformadoras en un sinnúmero de propuestas que integran el conocimiento, la ciencia y la tecnología de la mano del juego y la participación.

Cuenta, además, con un espacio lúdico interactivo con una amplia gama de dispositivos tecnológicos multimedia de última generación. Estos permiten ampliar la información de las especies que habitan el río y sus ecosistemas. Todas las innovaciones vienen en correlación con la participación de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación del Gobierno de Santa Fe.

 

 

Complejo astronómico municipal

También conocido como Planetario, se encuentra en el sector sudoeste del Parque Urquiza en la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe, Argentina

Ofrece funciones sobre temáticas referidas a los cuerpos celestes y a los fenómenos astronómicos, ideadas y producidas por la institución y proyectadas sobre una cúpula semiesférica que funciona como pantalla, permitiendo así una experiencia vívida de la bóveda celeste.

 

Museo del Deporte santafesino

El novedoso museo del deporte de Rosario propone una emotiva experiencia a través de la gloriosa historia deportiva de nuestra provincia.

Sus características lo posicionan como un museo impactante, ya que desarrolla sus contenidos temáticos mediante el uso de las más diversas e innovadoras técnicas de exhibición que sumergen al visitante en una experiencia sensorial sobre el deporte de la región y sus hazañas. 

En sus diferentes pisos y secciones se ponen en juego diversos recursos tecnológicos para relatar la historia de la cultura deportiva:

  • Juegos interactivos sobre los Panamericanos, Sudamericanos, Paraolímpicos y las Olimpíadas de la Juventud.
  • Mapping 3D.
  • Reproducciones 360º y proyecciones holográficas.
  • Pantallas led gigantes.
  • Pantallas/mesas interactivas con información extra, datos y curiosidades del deporte de la provincia.

 

Leé:  “Cultura Digital en Rosario: Museo del Deporte Santafesino”

 

 

MALBA 

Por otra parte, el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires fue el primero en cerrar sus puertas en marzo del 2020, y el principal impulsor de los recorridos virtuales. En aquel contexto, este museo propuso una agenda de actividades y contenidos online para acercarse a su comunidad. Entre ellos, contenido artístico, el proceso de montaje de la exposición, las tareas de restauración y conservación de las obras, la cartelera cinematográfica del museo y un ciclo de conversaciones y encuentros con autores literarios. 

Hoy más que nunca somos conscientes de que nuestro rol social es proponer otros temas de conversación en la agenda, hacernos compañía e imaginar nuevos mundos a través del arte y la cultura. ¡Estamos conectados!, alegaba el museo en su página web. 

Actualmente ofrece un recorrido virtual por la puesta actual de la colección y por las exposiciones temporales para toda la comunidad online. Se trata de una visita 360 por las distintas obras, que ofrece habitar el espacio de una forma muy similar a la presencial. El espectador puede detenerse en cada una de las piezas artísticas y leer las diferentes descripciones. Además, pueden observarse las diferentes producciones audiovisuales en los televisores del museo. 

 

MACBA

El Museo de Arte Contemporáneo de Buenos Aires ha implementado el storytelling en convergencia con la tecnología a partir de los últimos meses del 2020. Utilizando entrevistas y materiales de archivo se creó la colección “Retratos en Movimiento”: una serie que relata los pensamientos y obras de distintos artistas que exhiben o son parte de la Colección del museo. 

De esta manera,  el espectador tiene la posibilidad de sumergirse en las obras de diferentes artistas a partir del relato en primera persona de sus autores. Una experiencia interesante y particular. 

El MACBA dispone también de una colección digital, donde el público puede acceder a más de 500 obras y sus descripciones sin la necesidad de encontrarse físicamente en el museo.

 

Nuevos devenires en la difusión cultural

El ámbito cultural, por definición, siempre se ha encontrado y se encuentra en constante evolución. En los últimos años, las nuevas tecnologías han sido un elemento fundamental para generar disrupciones en la forma de exponer obras artísticas. En este movimiento permanente, los relatos son dotados de nuevas capas de sentido. Sin embargo, las historias siempre persisten en el tiempo, conservando aquellos elementos patrimoniales que constituyen la identidad colectiva. 

 

Por Julieta Angeloni, Virginia Bartolucci, Lourdes Maggi y Paula Vallacco, estudiantes del Seminario Ciberculturas, ciclo 2021.